Publisher's Synopsis
El bautismo en agua era acompañado con la proclamación de que Jesús es Señor y que Él vive. Era el tema central de su proclamación. Los apóstoles se constituyeron en testigos, y añadían a su predicación, y nosotros somos testigos. Esta constancia de predicación llenó a Jerusalén entera de esta doctrina, doctrina que con el tiempo se conoció como la doctrina de Cristo. Era la intención establecer que Jesús es el Mesías, que debemos someternos a su señorío, y que a su retorno a la tierra seriamos resucitados, de haber muerto para ese entonces. Esta intención está contenida en la proclama del Evangelio del Reino, la cual el apóstol Pedro fue el primero en establecer el día de la segunda gran fiesta solemne, la fiesta de Shavuot (pentecostés):