¡Hay un Espíritu!

HAY UN ESPÍRITU, es un intento de confirmar su sellamiento en Cristo, o si es así, de provocar un alboroto espiritual, contra la enseñanza trinitaria errónea que desprecia las palabras "el Espíritu de Jesucristo" ampliamente citadas en el Nuevo Testamento. Aquí se presenta una andragógicacuestionario desarrollado con la intención expresa de probar su dependencia de la sana doctrina. Ser capaz de discernir los maravillosos atributos pastorales de Jesús a través de las funcionalidades de su Espíritu Santo, en nosotros hasta el fin del mundo, es un requisito previo. Tomar esta necesaria libertad que dan las Sagradas Escrituras no es infantil, sino más bien una protección frente a las batallas contra los milagros malvados, intercalados por las últimas copas fatídicas de la ira de Dios y el Armagedón del milenio escatológico. Por último, ¿podría definir el estado de los muertos? ¿Las manifestaciones visibles del Espíritu Santo de Jesús? Milagros malvados? Así que empieza por destacar entre los que violanlos Mandamientos de Moisés y el Evangelio de Cristo, para llegar a ser "señores" del "Señor", ¡sin el riesgo de cometer un pecado justo contra el Espíritu de Dios!